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La Luna y su efecto sobre las mareas

Posiblemente, gracias a la Luna y su efecto sobre las mareas, hay vida en el planeta Tierra. ¿Quieres averiguar toda la historia de nuestro satélite natural?

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Desde hace miles de años, el hombre se ha interesado por el conocimiento sobre La Luna. Sus movimientos y fases, su composición, su influencia sobre las mareas en la Tierra, etc. Realmente, La Luna ejerce importantes efectos sobre La Tierra, tanto a nivel geológico como biológico. En esta entrada analizaremos los últimos estudios publicados hace tan sólo unos días sobre su geología. También comentaremos uno de los hechos mejor estudiados, la Luna y su efecto sobre las mareas. Para finalizar ¿sabes reconocer a simple vista si está en cuarto creciente o menguante? Te cuento cómo ¡Vamos allá!

 

Origen de La Luna

Para remontarnos a su origen, primero hablamos del origen de nuestro planeta. La Tierra se formó hace unos 4600 millones de años. Por entonces su temperatura era mucho mayor a la actual y además se trasladaba por una órbita ligeramente diferente a la actual. Esta órbita era casi compartida por otro protoplaneta llamado Theia, que fue acumulando masa hasta que su fuerza gravitatoria combinada con la cercanía en órbita a la Tierra facilitó que colisionaran. Esta teoría se conoce como «Teoría del Gran Impacto».

Luna y su efecto sobre las mareasSe estima que en el momento de la colisión y explosión producida, la bola de fuego generada fue incluso más luminosa que el propio Sol. 20 millones de metros cúbicos de lava se expulsaron a la órbita de la Tierra y al cabo de unos 10 años, este anillo de gases y minerales se fusionó, creando la Luna. Este cataclismo ocasionó la formación de nuestro único satélite natural.

«Sin La Luna, quizás no hubiera sido posible la vida en La Tierra»

Al principio, la Luna se separaba de la Tierra unos 30.000km, lo que suponía que su fuerza gravitatoria sobre la Tierra era 1000 veces mayor que la que hay actualmente que se encuentra a 384.400 km.

Esta enorme fuerza producía unas mareas mucho más acusadas que ahora y algunas hipótesis afirman que este hecho fue clave para el destino de La Tierra. En especial, para la formación de vida, ya que permitió que la superficie muy caliente se enfriara más rápido por la expansión de las olas y las subidas de mareas. Cabe la posibilidad incluso de que sin la Luna no se hubiera producido vida o ésta, al menos no fuera igual, ya que las mareas influyen en el estilo de vida y la supervivencia de muchas especies, especialmente las marinas.

Últimos hallazgos: agua de Luna

El 24 de julio de 2017, Milliken y Li publicaban en la revista Nature Geoscience un artículo sobre los nuevos datos de la composición de La Luna. Este estudio revela que materiales volcánicos que han quedado alojados en cráteres lunares y que provienen del manto de La Luna, están muy enriquecidos en agua. Mucho más que el resto de rocas y terreno que componen la superficie lunar.

Teniendo en cuenta que estas rocas provienen de actividad volcánica de la Luna y que por tanto, son indicios de las rocas que componen el interior lunar, esta evidencia nos lleva a sospechar que el interior de La Luna puede contener altas cantidades de agua. Al menos, se baraja el dato de que hay tanto agua como hay en el manto de La Tierra, lo cual apoya la hipótesis de que el origen de La Luna, en realidad está en La Tierra y apoya la Teoría del Gran Impacto como su origen.

 

La Luna y su efecto sobre las mareas

¡Ay Luna Marinera!

La Luna ejerce un gran poder de atracción sobre la Tierra al igual que viceversa. La fuerza gravitacional de la Tierra permite que La Luna se mantenga en órbita a su alrededor. La Luna presenta un movimiento de rotación sobre su propio eje de unos 28 días y de traslación alrededor de la Tierra de la misma duración, aproximadamente 28 días. Esta concordancia es la clave de que siempre nos muestre la misma cara. Va rotando a la par que trasladándose.

La Luna, a su vez, ejerce una fuerza gravitacional sobre La Tierra y todos sus materiales: continentes, agua y su atmósfera gaseosa. La más perceptible es la fuerza que ejerce sobre el agua, ya que al ser líquida es más maleable y por tanto se deja llevar sin ofrecer tanta resistencia por esta fuerza gravitacional.

Aunque podría ser perceptible tanto en mares abiertos como lagos, es mucho más acusada a nivel del mar. Por ello, percibimos esa subida y bajada de las mareas, pleamar y bajamar respectivamente, acorde con la aproximación o distanciamiento de La Luna.

la Luna y su efecto sobre las mareas.Sobre los continentes también existe esta fuerza, pero no tienen tanta capacidad de moldearse, por lo que no se altera perceptiblemente su posición. En el caso de la atmósfera, sus capas se elevan y descienden también hacia La Luna. No hay pruebas fehacientes de que estos movimientos influyan sobre el clima de manera directa, pero podrían tener ligera influencia en las subidas y bajadas de presiones atmosféricas y con ello del aumento de precipitaciones.

Como la fuerza gravitacional de la Tierra también es muy fuerte, el agua no se aleja libre hacia la Luna. Solo se abomba hacia ella, pero esta fuerza terrestre en dirección contraria, la mantiene «pegada» a ella. Lo mismo ocurre con la atmósfera, y no permite que se disperse hacia la Luna. Exactamente igual con los animales y plantas, entre ellos nosotros los humanos, por eso no podemos percibir la fuerza de atracción y no levitamos hacia la Luna, ¡salvo nuestros ojos que se escapan a mirarla!

El Sol también ejerce fuerza gravitatoria sobre La Tierra, permitiendo mantener su órbita de gravitación a su alrededor. Con ello, también ejerce fuerza sobre las mareas. Aunque la masa del Sol es mucho mayor que el de La Luna, lo cual multiplica mucho su fuerza gravitacional, su distancia a La Tierra también es muy superior. En términos absolutos, La Luna ejerce mucha más fuerza efectiva en las mareas y es la principal responsable de sus cambios.

Los momentos en que hay más actividad en las mareas es cuando la Luna se encuentra en sus fases llena y nueva. Especialmente, en Luna nueva que es cuando está alineada con el Sol y se suman sus fuerzas contra la de La Tierra. Estas situaciones, con Luna llena y Luna nueva, ocasionan las llamadas mareas vivas. Por el contrario cuando La Luna forma un ángulo de 45º con el Sol, durante los cuartos tanto creciente como menguante, las fuerzas de la Luna y del Sol se contrarrestan y están más calmadas las aguas terrestres, las mareas muertas.

 

Luna menguante o luna creciente

Hay una técnica muy sencilla para averiguar a simple vista, sin necesidad de tener un calendario a mano que nos chive, la fase lunar. Obviamente, cuando es Luna nueva no podemos verla y cuando es Luna llena forma un círculo perfecto en el firmamento. Además, en las noches de Luna llena, se percibe mucha más luminosidad, por su luz reflejada del Sol.

La dificultad viene con la menguante y creciente ¿Sabrías decir cuál es cuál?

 

La Luna y su efecto sobre las mareasLa regla de la D y la C

Cuando la parte iluminada de La Luna forma una C está en fase menguante o decreciente, cuando forma una D está en fase creciente.

Es como si las letras representaran el fenómeno que empieza a escribirse por la letra inversa, es decir: C=decreciente, D=creciente. Esta regla funciona siempre y cuando te encuentres en el hemisferio norte de la Tierra. Cuidado, porque en el Sur sería a la inversa. De hecho, la misma Luna la vemos al revés según nos encontremos en un hemisferio u otro. Si viajas a tu hemisferio opuesto alguna vez, obsérvala, verás como las zonas más blancas y más grises están justo al revés.

Luna en forma de C = luna menguante

Luna en forma de D = luna creciente

 ¡Mírala a ver cómo está esta noche!

La Luna y su efecto sobre las mareas 1

Algunos vídeos para finalizar

Bibliografía e imágenes

Brown University (2017). Moon has a water-rich interior. ScienceDaily. Disponible en: https://www.sciencedaily.com/releases/2017/07/170724114125.htm

Ralph E. Milliken, Shuai Li. Remote detection of widespread indigenous water in lunar pyroclastic depositsNature Geoscience, 2017; DOI: 10.1038/ngeo2993

Imágen de la entrada realizada por Julián Martínez, autor del blog MagicEarth disponible en www.magicearth.es

Geoenciclopedia disponible en: http://www.geoenciclopedia.com/fases-de-la-luna/

Heliogeatea Blog, disponible en: http://heliogeatea.blogspot.co.uk/

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Profesora de educación secundaria. Bióloga especializada en Biología Sanitaria, Biología Molecular y Biotecnología. Amante de la naturaleza, el ajedrez, los videojuegos, la pintura y los ratos de lectura.

6 COMENTARIOS

  1. Me encanto!. La verdad es un maravilloso documento ya que nos habla sobre el origen de la luna, Últimos hallazgos: agua de lunala, luna menguante o luna creciente. Me quede con la duda de ¿Por qué la edad de la luna es mucho mayor al de la tierra?
    Me llamo mucho la atención la parte de la fase lunar y la regla de D y la C ya que podemos aplicar esta regla para saber si la luna está en fase menguante o decreciente ya que es una regla muy sencilla me pareció fascinante que me dio mucha inquietud experimentarlo.

    • Hola Rufina! Me alegro de que te haya gustado la entrada. La Luna no es más longeva que la Tierra, si no al revés 🙂 Un saludo

  2. me dio mucho gusto al saber de este tema para mi fue muy interesante porque habla de los temas origen de la luna, ÚLTIMOS HALLAZGOS, luna marinera, luna menguante o luna creciente, la regla de la d y la y pues fue un documento INTERESANTE porque PODRÍAMOS aprender mas del tema.

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